La lavanda te da la bienvenida sin hacer ruido. Su aroma fresco y sereno se queda entre tus prendas como un suspiro limpio, que ordena el aire y relaja el cuerpo. Ideal si quieres que cada vez que abras el armario, sientas que todo está un poquito más en calma.

Usa la cinta de algodón para colgar el ambientador en una percha o en la barra del armario. Así, la fragancia se irá dispersando poco a poco, de forma suave y constante.

Si deseas ponerlo en un cajón, entre la ropa, puedes tenerlo dentro la bolsa de algodón, para mayor protección de las prendas.

Evita colocarlo cerca de fuentes de calor, radiadores o luz solar directa, ya que podría derretirse.

Mantener lejos del alcance de niños, mascotas y zonas demasiado cálidas o donde toque la luz directa.

Peso total: 28g | Diámetro de 6 cm

El ambientador está hecho a mano en nuestro taller, con mucha calma y amor. Lo fabricamos con cera de soja 100% vegetal, y colocamos las flores una a una con delicadeza.